El Papa Benedicto XVI dirigió un emotivo saludo a los niños de México desde la Plaza de la Paz de la ciudad de Guanajuato. Ante miles de personas que desde tempranas horas del día se apostaron en el lugar, el Pontífice aseguró que es posible cambiar el mundo e hizo un llamado a la familia, la escuela, la Iglesia y la sociedad a trabajar para que puedan “recibir como herencia un mundo mejor, sin envidias ni divisiones”.
Si dejamos que el amor de Cristo cambie nuestro corazón, podremos cambiar el mundo – Benedicto XVI