que quisiste tener una madre en la tierra,
mira con ojos de compasión a tu sierva (nombre de la madre),
a quien has llamado del seno de nuestra familia.
Bendice el amor que siempre nos tuvo en la tierra
y haz que desde el cielo,
pueda seguir ayudándonos.
Toma bajo tu protección misericordiosa
a nosotros a quienes ella a tenido que abandonar en la tierra.
Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.