Julio Pachón en este su testimono de conversión nos relata que permaneció por mucho tiempo encadenado al alcohol, las drogas, la homosexualidad, la violencia, los malos ambientes de vida, el rencor, aunque él pensaba que todo eso era lo normal. Vivía en un vacio total pero no se daba cuenta porque estaba alejado de Dios. Vivía una vida en apariencia placentera, pero falsa en el fondo, y era alto el precio que debía pagar. Fue hasta que Dios en su misericordia comenzó a llamarlo para darle la plenitud de la felicidad. Fue en una confesión donde se encontró de frente con Jesucristo quien le sanó sus profundas heridas de las que ni él mismo se ocupaba.
Julio Pachon: Hay personas que han perdido la esperanza y la confianza en Dios. Cuando se tiene la confianza en Dios no hay de que temer, hay que tener la seguridad de que Dios puede hacerlo todo y realmente lo hace todo para el bien de los que ama. La prueba más grande de amor es la cruz, Cristo murió por nosotros y eso es garantía (dice la misma escritura) no nos negará nada de lo que le pidamos si lo pedimos con fe. Para Dios no hay nada imposible, Él puede hacerlo todo y todo lo hace verdaderamente nuevo. Cuando algo queda defectuoso, cuando está mal, cuando no sirve, cuando no funciona, Dios tiene el poder para cambiarlo y hacerlo nuevo.
He aquí que hago todas las cosas nuevas. Apocalipsis 21, 5
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